Sinopsis: Callie perdió a sus padres cuando las guerras de las Esporas aniquilaron a todos los que tenían entre 20 y 60 años. Ahora es una starter, una adolescente que vive en la calle como una vagabunda y lucha por sobrevivir. Su única esperanza es Destinos de Plenitud, una inquietante empresa que contrata a adolescentes para que alquilen sus cuerpos a los enders, ancianos que quieren volver a ser jóvenes. Callie se hace donante, pero el neurochip que lleva en su cabeza se estropea y despierta en la ostentosa y lujosa vida de la ender que ha alquilado su cuerpo. Es una vida de cuento... hasta que descubre que los planes de Destino de Plenitud son más siniestros que la peor de sus pesadillas.
Sobrevivir es sólo el principio.
En esta situación, Callie ve la luz al final del túnel. Gracias a un conocido descubre Destinos de Plenitud, una empresa que, clandestinamente, alquila cuerpos de adolescentes a enders que desean vivir una segunda juventud. Desesperada, Callie acepta el contrato, pero muy pronto descubrirá que no todo es tan bonito como parece, y que Destinos de Plenitud tiene unos objetivos mucho más siniestros que un simple alquiler de starters.
Bueno, la sinopsis de esta novela me llamó la atención desde el momento en que la vi hace meses en la librería, pero no fue hasta hace unos días que mi madre me la regaló. Me puse a leerla en seguida, más que nada porque le tenía muchísimas ganas. Y tengo un par de cosas que decir.
La primera es que, aunque el mundo distópico que ha creado Lissa Price me ha parecido fascinante, lo cierto es que me he tenido que imaginar casi todo. Sí, menciona las guerras de las Esporas en el Pacífico, el aislamiento de Estados Unidos, las vacunas y las posteriores muertes de todos los adultos... Pero son sólo eso. Menciones. No explica nada de nada, así que hay que hacer uso de la imaginación. Personalmente me parece que es una buena idea que podría haberse explotado mucho más, pero, en fin, quizá en el segundo libro la cosa cambie. Habrá que esperar un poco para juzgar este aspecto.
Los personajes de la novela me han gustado muchísimo. Callie me ha encantado, porque me ha parecido una chica muy auténtica. Y, aunque no en todas las situaciones actúa como lo habría hecho yo, su motivación es siempre su hermano pequeño, una razón muy loable para jugarse la vida. En este sentido, la relación de Callie con su hermano me ha recordado mucho a Katniss y Prim en Los Juegos del Hambre.
En cuando al resto de los personajes, mis opiniones difieren con cada uno. Helena me pareció estupenda en todo momento, y muy digna de admiración a pesar de pertenecer al grupo de los enders. Con Blake tuve un problema, y es que me resultó muy falso tanto amor en tan poco tiempo, aunque al final la historia misma me dio sus propias explicaciones. Y hablando de amor, he echado de menos a Michael, presentado al principio como si fuera un personaje importante y que luego prácticamente no vuelve a hablar en toda la novela. Espero que en la segunda parte tenga un poco más de protagonismo. Y en cuanto a los enders, exceptuando contadas excepciones, no he podido sentir más que puro asco.
Es realmente repulsivo cómo, en la novela, los viejos se han adueñado del mundo y han relegado a la juventud a una clase marginada, resignada a mendigar y a esconderse. Y más repulsivo todavía es que, viendo la situación de penuria que pasan muchos, sean capaz de pagar increíbles sumas de dinero para adueñarse del cuerpo de los más desesperados sólo para pasárselo bien. Asqueroso.
El ritmo de Starters es frenético, en algunos casos demasiado. Para mi gusto, la trama se desarrolla demasiado rápido, y el desenlace, que es lo veraderamente interesante de la novela porque es el momento en el que el lector más información tiene, es muy precipitado. Eso sí, espectacular. Pero lo cierto es que, en algunas ocasiones, me costó mucho asimilar lo que estaba leyendo a la vez que seguía el ritmo de la narración. Habría preferido que fuera un poco más largo y se tomara las cosas con un poco más de calma.
Narrado en primera persona por la protagonista, vivimos de primera mano todas sus desventuras, protagonizamos todas sus persecuciones y sentimos su tristeza y su desesperación. Pienso que para mí ha sido muy fácil identificarme con Callie (y con todos los starters a los que ella representa) porque, al fin y al cabo, yo también soy una adolescente, y podía sentir, como ella, el odio y la indignación para con la manera de los enders de tratar a los starters. He podido sentir lo mismo que ella en cada página, y eso es bueno a la hora de leer un libro.
Starters no es nada predecible y está lleno de giros argumentales de lo más inesperados. Ha conseguido dejarme con la boca abierta en más de una ocasión, y eso no es algo que, a estas alturas, muchos libros consigan. La verdad es que, aunque al principio no conseguía engancharme del todo a la historia, al final ha terminado por atraparme, y me gustado muchísimo. Y ahora sólo me queda esperar ansiosa por la segunda parte, Enders.
Puntuación: 8
Me llama mucho la atención :D Las distopías me gustan bastante así que me lo apunto a la lista
ResponderEliminarMe interesa es un género que me suele gusta mucho aunque el detalle ese de no explicar algunas cosas y dejar que trabaja nuestra imaginación sin ninguna ayuda no me gusta demasiado pero bueno.
ResponderEliminarA lo mejor se lo está reservando para la segunda parte. Quién sabe.
EliminarTengo muchas ganas de leerlo aunque siempre se me acaba poniendo otro por delante cuando voy a comprarlo :)
ResponderEliminarsaludos!
Yo lo he leído y también me gusto mucho , opino casi lo mismo que tu , deseó la segunda parte porque el final es tan aababahnab!
ResponderEliminarOjalá salga más Michael en la segunda parte ,yo también me esperabas más de el
Michael <3 Parecía todo importante y luego... NADA :(
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